Las imágenes que nos vienen a la mente al pensar en Silicon Valley son las de igenieros que trabajan en aparatos futuristas en garajes, ambiciosos emprendedores que construyen grandes yates luego de ganar fortunas y habiles capitalistas de riesgo que proporcionan el dinero inicial a los proximos Google o Facebook
Pero Silicon Valley tambien tiene un costado menos glamoroso que pronto tendra su propio programa. Se esta rodando una serie televisiva que hace que aspirantes a miembros d un reality Show trante de aprovechar el ultimo auge tecnologico, y s estreno esta previsto para este invierno. “Es un mundo donde todos parecen pensar que una buena idea puede llevar e inmediato al éxito y a grandes riquezas porque despues de todo, ya lo ha hecho muchas veces”, escribio David Streitfeld en The New York Times.
Randi Zuckerberg, que hasta el verano pasado era ejecutiva en Facebook, el emprendimiento de su hermano menor, es productora ejecutiva del programa, que alarma a muchos.
Una excolega e Facebook de Zuckerberg twitteo que se sentia “aterrada” ante la idea de que la serie pueda convertir a Silicon Valley “en el haznerreir de una industria”. “Creanme, en esta industria hay mucha gente que se pone en ridiculo sola”, contesto Zuckerberg. “!No hacemos mas que plasmar la realidad!”
En una escena del programa, Kim taylor habla vagamente sobre un emprendimiento dirigido al mercado almercado de lujo femenino. “Es algo indefinido, hasta para Taylor, que llego hace 2 añosde Chicago”, escribio Streifeld. “Pero es ciertoque su emprendimiento tiene apenas unos dias de existencia”.
Taylor admite ante su mentora que no tiene formacion en codificacion ni en desarrollo de producto, habilidades que poseen los emprendedores mas exitosos.
El lugar donde reside el primer eslabon de la cadena alimentaria tecnologica tiene poco atractivo para los productores de reality shows. En realidad, en ese lugar ni siquiera hay televisores. Estos “albergues de hackers” estan llenos de camas literas donde jovenes progamadores, diseñadores y cientificos trabajan, comen y duermen, informo el New York Times.
Jade Wang, una neurocientifica de 28 años que trabajo en la NASA, tomo conciencia de que podia convertir ese tipo de alojamiento en una empresa. En compañía de amigos, opera tres casas en la Bay Area bajo el nombre de Chez JJ. Según declaro al New York Times, la idea se le ocurrio cuando se dio cuenta de que los “nerds” como ella quieren estar rodeados de personas similares. “Los nerds no necesariamente son torpes en terminos sociales”, dijo la Dra. Wang al New York Times. “Si en un espacio hay un 99% de nerds y una sola persona normal, esta seria la torpe en el plano social”.
Cuando una compañía como Twitter instala su sede en un barrio marginal, como lo hizo en San Francisco luego de que se le atrajera con incentivos de impuestos, puede modificar el equilibrio de las cosas, informo el New York Times. En el restaurante chino y japones Iron Work, los dueños se sentian presionados. “Sin duda Twitter es bueno para la ciudad, ¿pero que pasa en mi caso?” declaro al New York Times la propietaria, Jenny Liu, de 41 años, que destaco que su alquiler mensual pasaria de US$8 mil a US$ 12 mil.
Twitter, Zynga, Yelp y otras compañias de redes sociales han hecho de San Francisco su hogar, un lugar donde generan empleo y elevan los alquileres comerciales. Al mismo tiempo, una creciente cantidad de jovenes trabajadores del sector tecnologico tambien se traslada a laciudad y viaja al sur, a Silicon Valley, lo que tambien deriva en un aumento de los alquileres y lleva al desplazamiento de antiugos residentes.
“Si se tiene una ciudad contigua al personal del area de tecnologia, el resultado puede ser muy interesante desde el punto de vista de esos trabajadores”, dijo al New York Times Peter Cohen, director de una organización de alojamiento sin fines de lucro. “Pero ese no es el tipo de gran diversidad de poblacion que hace de San Francisco el lugar que es”.
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